
14 Nov Diferencias entre autónomo y freelance
Cuenta la leyenda que freelance es solo un anglicismo para llamar de forma interesante a los autónomos de toda la vida. Y no se puede negar que ambos conceptos comparten características en común, como el hecho de trabajar por cuenta propia y ser tu propio jefe. Pero, a pesar de todas sus similitudes, ambos términos hacen referencia a situaciones laborales distintas. En el artículo de hoy te explicamos todas las diferencias entre autónomo y freelance. Si quieres saber cuáles son, ¡sigue leyendo!
Diferencias entre autónomo y freelance
La primera diferencia entre un autónomo y un freelance radica en que éste último no necesita estar inscrito en el RETA (Régimen Especial de Trabajadores Autónomos) para realizar sus trabajos por cuenta propia. Dicho de otra forma, no necesita estar dado de alta como autónomo, aunque sí deberá estarlo en Hacienda, disponer de su epígrafe del IAE (Impuesto de Actividades Económicas) y pagar el impuesto correspondiente.
Los trabajadores autónomos están considerados personas físicas, con derechos y obligaciones, como cualquier empresa, aunque en este caso dicha empresa sean ellos mismos. En cambio, la figura de freelance no está considerada en la legislación española, y tampoco en la europea. Eso no quiere decir que ser freelance no sea legal, pero si que cuenta con algunas limitaciones respecto a lo que se puede ganar trabajando como freelance.
Y es que existe una condición por la cual un freelance deberá inscribirse en el RETA, y es cuando su sueldo realizando proyectos independientes sea igual o mayor al salario mínimo interprofesional, actualmente estipulado en los 1.000 euros mensuales. Por lo tanto, dejaría de ser freelance para convertirse en autónomo y pagar las cuotas correspondientes como tal.
De hecho, existen muchos casos en los cuales los autónomos comienzan su andadura como freelance con pequeños contratos esporádicos, sobre todo en sectores como la música, la fotografía, el diseño gráfico o la traducción de textos, entre muchos otros, sin que eso signifique que no existan personas que trabajen como freelance de forma prolongada sin que tengan ningún interés ni obligación de convertirse en autónomos.
Esa es la segunda gran diferencia entre autónomo y freelance. Mientras un autónomo es aquel que vive de un negocio propio, y este supone su principal sustento, un freelance trabaja con una mayor eventualidad, con contratos que tienen un carácter muy concreto y una fecha de fin estipulada de antemano. Los freelances suelen tener otro trabajo que le otorga sus ingresos principales, y realiza trabajos freelance como un extra.
Por último, hay otros aspectos que diferencian la figura del autónomo frente a la del freelance, como por ejemplo que el freelance tiene libertad horaria para realizar sus trabajos por cuenta propia, mientras que los autónomos pueden o no tenerla, puesto que no es una característica indispensable en éstos.
Taxa Asesores ayuda a los autónomos
Ahora que ya sabes con exactitud que es un freelance y qué es un autónomo, ¿cómo te defines tú? Quizá quieras montar tu empresa ya y empezar a vivir de ella, o puede que prefieras empezar poco a poco, con pequeños proyectos hasta hacerte con una cartera de clientes que te aseguren un buen sueldo a final de mes.
Decidas lo que decidas, es importante que sigas los procesos necesarios para empezar a facturar los contratos con tus clientes y tener al día todo el papeleo. En Taxa Asesores tenemos a tu disposición una asesoría fiscal y laboral para ayudar a agilizar todos tus trámites burocráticos y evitarte problemas derivados de no disponer de los documentos necesarios para tu ejercicio profesional.
Si tienes más dudas sobre las diferencias entre autónomo y freelance o quieres que te asesoremos sobre cualquier otro tema relacionado con autónomos y empresas, ¡llámanos!
No Comments